Vaya por delante que son un jubilado de menos de 70 por
ahora, tiempo al tiempo.
Por supuesto, que no estoy en perfecta forma física,
faltaría más.
No comparto con algunos detalles. No soy nativo digital
pudiendo disfrutar de todos los tipos de vida;
con o sin conectividad. No me pierdo lo que me gusta, pero no me obliga a
perder el contacto directo con los demás e incluso no hacerles caso cuando la
conversación se pone extraña o pesada o vaya Usted a saber... Sin necesidad de
decir si me gusta, si te sigo, si te comparto, si te olvido, pero siempre
enseñando mi cara para el que sepa entender que lo vea.
Y vayan por detrás otros pensamientos.
La experiencia no solo es proporcional a lo vivido, ni al
número de experiencias, sino que una parte muy importante depende de la veces
que se ha metido la pata, y estoy seguro que el algoritmo que relaciona estos
parámetros y otros depende, al menos, de
la IA Inteligencia Artificial
de la IE Inteligencia Emocional, tanto en lo virtual como en lo físico.
Si conseguimos relacionar las generaciones actuales, los
milenians y otros como las incógnitas X, Y , Z, T y el resto como la tercera edad y anteriores llegaremos a la conclusión que las matemáticas importan. ¡Y cuantas
cosas más!
A lo que íbamos, lo importante es la belleza, en todas sus partes
(fuera, dentro, real, virtual,…)