lunes, 12 de julio de 2010

Color, Calor, Vida, Existencia


La belleza de las rosas, con su color, fragancia, inunda el espíritu en múltiples ocasiones, pero el calor, el paso del tiempo, la existencia en suma, va pasando de manera que aunque quede la sensación inicial, es imposible mantenerla con el paso del tiempo. La ilusión no se pierde, pero es perecedera, salvo el autoengaño, hasta que el entorno nos da de golpe el regreso a la realidad.
¿De donde se puede sacar fuerzas para asumirla?
Seguro que desde dentro de uno y de los suyos, esperando un futuro mejor.
Aunque siempre nos quedará la triste belleza de lo que ha sido y ya no es.
La próxima primavera ¿renacerá? salvo los avatares de la existencia, siempre en contrapunto, realidad virtual y realidad existencial.

1 comentario:

teleco dijo...

Para clarificar a los amigos, he de decir que la música de fondo que tenía en ese momento era Utopia de Mantus en el primer CD de su álbum Chonik